Y mi mamá que me pregunta "Nena ¿por qué lloras?" y yo no sé que contestarle. Mientras tanto Lucía duerme y yo sigo pensando mi respuesta. Y es que en realidad si sé por quién lloro, lo que no entiendo es por qué... ¿Por qué duele?...
Y Luli se despierta y calma mi frío, tan linda, tan frágil, vulnerable. Y sabiendo que su corazón sí es de cristal me da miedo su reacción el día que derrame una lágrima de dolor, porque en algún tiempo perdido esta casa se inundo de dolor...
No hay comentarios:
Publicar un comentario