Es irónico como antes, con el corazón roto y una sonrisa trataba de unir todas esas partes. Pedazito por pedazito relataba una nueva historia y corría con una sonrisa que a veces dolía mantener, pero era necesaria. Cómo ahora las ganas de escribir se van yendo y todo lo que fui se desvanece en una sombra que aguarda. A veces me siento como dentro de un capullo, quizás cuando salga brillé una vez más...
Y no hago publico este blog aún porque tengo serias dudas sobre su contenido!
No hay comentarios:
Publicar un comentario